Yoga para mamás y bebés
¿Sabías que existe el yoga para mamás y bebés? El yoga es una actividad antigua que se enfoca en la meditación, relajación y la búsqueda de una conexión entre el cuerpo, la mente y el espíritu.
Ahora bien, leyendo esto, es posible que pienses que no hay forma lógica de que un bebé pueda conseguir todo esto. Sin embargo, es posible practicar yoga a cualquier edad, incluso siendo un bebé.
Desde hace mucho tiempo, esta actividad dejó de ser exclusiva para adultos. Gracias a ello, existe la posibilidad de que los más pequeños de la casa se adentren en este mundo. ¿Quieres saber cómo hacer yoga con un bebé? Entonces este artículo es para ti.
¿Puedo hacer yoga con mi bebé recién nacido?
Cuando hablamos del yoga para mamás y bebés, no estamos refiriendo a un proceso de estímulo externo desde que son muy pequeños. Por ello, cuanto antes empiecen mejor. De hecho, es mucho más simple para la madre si tiene experiencia en el yoga desde el embarazo, ya que podrá orientar al pequeño mucho más rápido para ayudarle.
En el caso de bebés recién nacidos hay tipos de yoga que se ajustan a las necesidades de la mamá/papá o, por supuesto el bebé. Siendo así, las posturas se adecúan para evitar incomodidad o riesgos. El yoga para mamás y bebés se lleva a cabo con la finalidad de establecer una conexión positiva entre el bebé y su cuidador. En el proceso, ambas partes consiguen la relajación de forma entretenida.
¿Puedo combinar el yoga para mamás con el porteo?
Como bien mencionamos antes, el yoga para mamás y bebés incide favorablemente en el vínculo inicial que se establece entre el bebé y su madre o padre. En este punto, es importante recordar que el acercamiento y el contacto, es vital en las primeras semanas de vida de nuestro bebé y, el yoga es ideal para fortalecer este nexo.
Una de las formas seguras de practicar yoga con un bebé recién nacido es a través del porteo. De hecho, muchísimas madres realizan esta actividad actualmente promoviendo la relajación y posturas para mejorar el equilibrio entre otras cosas.
Básicamente, el porteo consiste en llevar a nuestro bebé en un portabebés ergonómico y respetuoso. A pesar de que parece una práctica novedosa, la realidad es que las madres portean a sus bebés desde hace muchísimas décadas en bandoleras, mei tais, entre otros.
En este sentido, resulta beneficioso sacar el máximo provecho al porteo en sesiones de yoga para estimular tanto el vínculo como la regulación.
¿Cuándo puedo empezar a practicar yoga para mamás y bebés?
En realidad, la decisión de comenzar la práctica de yoga para mamás y bebés tiene mucho que ver con el proceso de recuperación de la madre y su estado de salud. Si bien es cierto que es posible empezar desde que el bebé es recién nacido, no olvides consultar con tu médico para asegurarte de que puedes empezar sin problema.
En todo caso, lo más recomendable sería esperar por lo menos las primeras seis semanas después del parto. Por otro lado, es indispensable que tomes las clases de yoga de la mano de un instructor profesional que te pueda orientar en todo el proceso.
¿Hay riesgos asociados al yoga para mamás y bebés?
Al igual que con cualquier actividad física, existen riesgos asociados con la práctica de yoga para mamás y bebés. Sin embargo, estos riesgos se pueden minimizar con precauciones adecuadas y practicando bajo la guía de un instructor de yoga capacitado.
Para las madres, los riesgos pueden incluir lesiones musculares o de ligamentos, especialmente si intentan realizar posturas demasiado avanzadas antes de estar preparadas. Las madres también deben tener cuidado de no exceder sus límites físicos y estar atentas a cualquier signo de dolor o incomodidad.
Para los bebés, los riesgos son muy bajos, siempre y cuando se practique de manera segura y bajo la guía. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los bebés pueden sentirse abrumados o incómodos durante la práctica y pueden llorar o necesitar ser alimentados o cambiados en cualquier momento.
¿Cuántas veces a la semana debería practicar yoga con mi bebé?
En realidad, no hay restricción para llevar a cabo sesiones de yoga con tu bebé siempre que tomes las medidas adecuadas y tengas el tiempo para hacerlo. Si eres principiante, es recomendable comenzar con dos o tres clases semanales e incrementar la frecuencia en función de tu evolución.
De hecho, si no dispones del tiempo suficiente, puedes realizar una sesión de yoga a la semana. En general, este punto depende de cada mamá.
¿Cuál es el mejor lugar para practicar yoga con un bebé?
Si decides empezar en el mundo del yoga para mamás y bebés, debes saber que necesitas elegir un espacio tranquilo y cómodo. De hecho, en estos casos, las clases de yoga online son la mejor opción. En primer lugar, te sentirás tranquila en casa con tu pequeño y al mismo tiempo, tendrás cerca todo lo necesario para atender sus necesidades.
Intenta elegir un buen momento del día y ubica un lugar de tu hogar en el que haya menos ruido posible. Es importante, además, tener todo lo que necesitas a la mano y evitar distracciones externas. Recuerda que se trata de un momento único para ti y tu bebé.
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