Yoga para personas con trastornos alimenticios

Los problemas de alimentación son mucho más comunes de lo que piensas. De hecho, en la actualidad, pese a todos los canales informativos que existen, gran parte de la población tiene severos problemas relacionados con su manera de alimentarse. En este sentido, queremos hablarte sobre el yoga para personas con trastornos alimenticios.

Por si no lo sabías, los problemas alimenticios se consideran enfermedades mentales. En general, quienes presentan este problema se preocupan por su peso constantemente al punto de no comer nada o comer demasiado para luego vomitar los alimentos.

Entre algunos de los trastornos más comunes relacionados con este tema tenemos la anorexia, la bulimia, atracones de comida y evitación de ingesta de alimentos. En vista de que se trata de un problema mental, es importante que sea tratado por un profesional en el tema. Sin embargo, como tratamiento complementario, es posible incluir el yoga.

 

¿El yoga puede ayudar en el tratamiento de trastornos alimenticios como la anorexia o la bulimia?

 

Cuando hablamos del yoga para personas con trastornos alimenticios, agrupamos a cualquier tipo de problema relacionado con la alimentación, incluyendo la bulimia. Básicamente, la bulimia se trata de un trastorno que se caracteriza por constantes atracones de comida seguidos por conductas compensatorias como vómitos inducidos.

En estos casos, el yoga para personas con trastornos alimenticios es útil como tratamiento alterno, pero no es la solución a estos problemas, pues como bien mencionamos antes, es esencial consultar con un médico experto en estos casos.

En general, el yoga reduce el estrés y la ansiedad, lo que en la mayoría de casos tiene que ver con el desarrollo de problemas alimenticios. Por otro lado, esta actividad permite mejorar la autoestima notoriamente y la imagen que tenemos de nosotros mismos.

 

¿Qué tipo de yoga es más recomendable para personas con trastornos alimenticios?

 

El yoga para personas con trastornos alimenticios es diverso en función de la necesidad individual de cada persona. Por lo tanto, hay muchas opciones a tener en cuenta si decides empezar yoga con este fin. En general, lo que se recomienda es iniciar con sesiones de bajo impacto. Algunos de los tipos de yoga que se aconsejan para tratar problemas de alimentaciones son los siguientes

 

• Hatha yoga: este tipo de yoga es el preferido por muchos cuando se trata de un nivel de exigencia física bajo. En general, se trata de un tipo de yoga suave que se enfoca mayormente en la relajación y la autoconsciencia. El objetivo principal del yoga para personas con trastornos alimenticios, en este caso, es fomentar la concentración.
• Yoga restaurativo: este tipo de yoga se orienta hacia el descanso y la relajación. De hecho, se suelen utilizar mantas y almohadas para apoyarse durante las sesiones. La idea, es permitir que el cuerpo adopte posturas cómodas y suaves para alcanzar los niveles más altos de relajación.
• Yin yoga: el yin yoga va hacia los estiramientos profundos y la relajación. La idea de este tipo de yoga para personas con trastornos alimenticios es mantener ciertas posiciones para favorecer la relajación y autoconsciencia.

 

En general, cualquier tipo de yoga puede ser beneficioso para personas con trastornos alimentarios si se aborda con precaución y se trabaja con un instructor capacitado y experimentado. Lo más importante es fomentar una conexión suave y compasiva entre la mente y el cuerpo y promover el autocuidado y la aceptación del cuerpo.

 

¿El yoga puede ayudar a reducir la ansiedad y la depresión relacionadas con los trastornos alimenticios?

 

Definitivamente sí. El yoga es útil para aliviar la depresión y la ansiedad, en cualquier caso. Por ello, no solo es ideal en el caso de problemas con la alimentación, sino en cualquier contexto. Si quieres saber mucho más sobre cómo el yoga influye en el alivio de la ansiedad, revisa nuestro artículo: Cómo reducir la ansiedad con el yoga.

En el caso de las personas con trastornos de alimentación, la práctica regular de yoga permite mejorar la confianza en sí mismos. Además, evita la sensación constante de ansiedad que lleva, en la mayoría de casos, a los conocidos atracones de comida.

 

¿Es seguro practicar yoga durante la recuperación de un trastorno alimenticio?

 

A decir verdad, el yoga para personas con trastornos alimenticios es seguro en cualquier etapa de proceso, incluso en la recuperación. Puedes realizar yoga sin problema mientras te recuperas de tus problemas de alimentación. Recuerda que, el yoga funciona como un tratamiento terapéutico, por lo que es ideal que sigas practicando esta actividad por el mayor tiempo posible.

 

¿Qué precauciones debo tomar al practicar yoga si tengo un trastorno alimenticio?

 

Si estás decidido a practicar yoga para personas con trastornos alimenticios, hay algunos aspectos que debes tener presentes para que el proceso sea lo más positivo posible. En primer lugar, es importante que sepas que el yoga es una práctica personal y única, y no hay una única manera correcta de hacer yoga. Cada persona tiene su propio ritmo y nivel de habilidad, y es importante respetar y aceptar tus propios límites y capacidades.

Si eres nuevo en el yoga, comienza con una clase para principiantes. En estas clases, el instructor te guiará a través de las posturas básicas de yoga y te enseñará las técnicas de respiración adecuadas. Las clases para principiantes son una excelente manera de comenzar tu práctica de yoga y desarrollar una base sólida. También es importante que elijas un instructor de yoga que te haga sentir cómodo y que tenga experiencia trabajando con estudiantes de todos los niveles, incluidos los principiantes. Asegúrate de comunicar cualquier inquietud o pregunta que tengas con tu instructor antes, durante y después de la clase.

 

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